¿Qué vas a sentir al sumergirte en un jacuzzi para exterior?

Un jacuzzi para exterior nos ofrece una experiencia única, un viaje lúdico y onírico hacia regiones de tranquilidad, relajación, esparcimiento y placer que nos ayudan a reencontrarnos con la necesaria serenidad de la vida diaria y así poder sobrellevar de una manera plácida y tranquila las dificultades que se nos presentan.

Sin embargo, existen una serie de elementos que no se ha estudiado lo suficiente y es lo relativo a las sensaciones y sentimientos que podemos experimentar al sumergirnos en un jacuzzi de exterior a nivel creativo y de inspiración, tanto artística como intelectual.

Un largo viaje lúdico y creativo en estado líquido

Desde los inicios de la historia el hombre descubrió que el agua no solo era vida, sino también una fuente inagotable de inspiración y creatividad; era una musa que ayudaba a orientar y canalizar sus inquietudes, sus aspiraciones y en especial sus sueños y motivaciones diarias.

Célebre fue el momento en que Arquímedes logró desentrañar el misterio de cómo calcular de una manera efectiva el volumen de los cuerpos sumergidos para determinar la pureza del oro gracias a un rapto de inspiración mientras estaba dentro de su bañera, de ahí proviene la inmortal palabra “eureka” cuando nos referimos a un descubrimiento inesperado de enorme importancia.

Es bien sabido que en la antigua Grecia y luego en el Imperio Romano, los nobles y patricios se reunían en los baños públicos porque era un lugar perfecto para recargar las energías y revitalizar las ideas, pero también era un sitio adorado por artistas, poetas y dramaturgos porque esa tranquilidad y armonía era una fuente maravillosa de inspiración.

Con el paso del tiempo una inmensa cantidad de pintores se han rendido al misterio del agua como fuente de inspiración.

Grandes artistas como Canaleto, Monet, Turner o Pizarro dedicaron muchísimas de sus obras pictóricas a intentar replicar la fascinación que el agua ha despertado desde siempre en el talento humano mediante escenas playeras, en ríos o en extraordinarias marinas.

En épocas recientes se han abierto exposiciones representativas de grandes pintores para intentar explicar la magia del agua.

Una de las más interesantes se celebró a inicios del año 2001 en el Palacio del Almudí bautizada como “Memorias del Agua” donde se exhibieron una gran cantidad de oleos e ilustraciones de naturalezas muertas, paisajes y marinas donde el vital líquido era la gran protagonista.

Estas obras provenían en su mayor parte del artista Inocencio Medina Vera, cuyos dibujos, grabados, ilustraciones y bocetos dan cuenta de lo mucho que lo inspiraba, a nivel tradicionalista como artista de su lugar y momento histórico, el inmenso poder del agua y su notable influencia a nivel inspirador.

Se trata de un hecho que se vio reflejado en curiosos cuadros y pinturas donde Medina Vera representaba ilusiones y espejismos a base de burbujas de agua, los hermosos tonos cromáticos de una suavidad extraña e intensa y de lo que se denominó una “belleza etérea” que caracterizó su arte de manera determinante.

Captando el poder del agua de manera Ilustrativa y fotográfica

Pero no solo la pintura, que es el arte que mayor fuerza gráfica ofrecía en el pasado, se ha rendido al delirio lúdico del agua como fuente de creación. También la fotografía se transformó rápidamente en un medio perfecto para replicar sus encantos.

Grandes fotógrafos como Henri Cartier-Bresson, Sebastián Salgado o Dorothea Lang, cuya obra artística estaba enfocada en los quehaceres diarios, los dramas y en las vivencias de los seres humanos comunes, en algún momento de sus carreras también terminaron embrujados, de una u otra manera, por el inmenso poder inspirador del agua a nivel creativo.

De igual forma, otros fotógrafos más contemporáneos como José Casaú, Javier Carrión, Alberto Miralles o Carlos Mateo López han inspirado parte de su obra fotográfica a temas en donde el agua es la principal protagonista.

Además de la fotografía, muchos ilustradores y dibujantes han declarado al agua como la “musa” más importante de su obra artística desde muchos siglos atrás.

Una de las referencias ilustrativas más interesantes que existen del arte ilustrativo antiguo es la de Serafín Avendaño, un destacado artista gallego, cuya obra se conserva en el Museo del Prado, en donde plasmó el valor del agua dentro de las costumbres y tradiciones locales.

Más recientemente ilustradores afamados como Federico Ribas o Joaquín Xaudaró, ambos notables artistas publicitarios, también se rindieron a los embrujos y encantos del agua en muchas de sus ilustraciones.

La lista es interminable a nivel pictórico, fotográfico o ilustrativo en lo que concierne al agua como fuente de inspiración creativa, pero ciertamente no fue la única representación artística y como veremos a continuación su alcance es mucho más profundo de lo que imaginamos.

El agua es vida y también es diseño gráfico y creativo

El encanto lúdico y creativo del agua también ha inspirado a otros artistas publicitarios, más específicamente en el área del diseño gráfico.

Una de las más interesantes y representativas personas de esa interesante tendencia es Kiran Uk, una diseñadora que consigue la inspiración del monzón hindú para crear un concepto creativo que ha venido a denominar “Drops”.

No solo es concepto creativo integral, también ha permitido a Uk diseñar incluso una fuente tipográfica orgánica y específica bautizada como “Drops Font” que consigue plasmar todo lo que el agua representa para la vida.

Con un estilo curvilíneo, sinuoso y lleno de “serifs”, la Drops Font se convirtió rápidamente en una tendencia dentro de las organizaciones e instituciones ecológicas gracias a su estilo orgánico y espontáneo, ideal para transmitir emociones líquidas y naturales.

El agua, como catalizador de la creatividad e inspiración humana, ha abarcado inmensas cotas del arte humano, pero nada como en el mundo literario en donde el contacto con el agua y su influencia rozó instantes de auténtica locura creativa.

La pluma y el agua, una combinación extraña pero maravillosa

El gran escritor y guionista Dalton Trumbo no solo se hizo mundialmente famoso por enfrentarse con inmenso coraje y valentía a la tristemente célebre Lista Negra Anticomunista en tiempos del macartismo, sino también porque casi todas sus grandes novelas y guiones los escribía en la bañera.

De hecho, este extraordinario escritor montó un ingenioso tinglado en la bañera para que su loro, regalado por Kirk Douglas, pudiera disponer de su propio paral, también un área seca y sólida para instalar su máquina de escribir, tener a la mano una resma de hojas que pudieran permanecer secas y además un cenicero especialmente diseñado por él, ya que también era un fumador compulsivo.

Otra afamada escritora que sentía una especial predilección por desarrollar su obra literaria en el baño era Agatha Christie. Esta ingeniosa escritora de novelas de misterio se inspiraba en dos lugares sumamente extravagantes para escribir: la cocina y el baño.

Era tanta la necesidad de tener un área en el baño lo suficientemente confortable para inspirarse y escribir que llegó a renovar por completo su ducha y bañera para que el agua caliente durara horas y así permanecer relajada en medio del vapor mientras devoraba una manzana tras otra, a la vez que redactaba en su máquina de escribir especialmente diseñada para que permaneciera seca y libre de humedad.

Otro ejemplo de extraña inspiración era la de Joseph Conrad. El escritor inglés, mundialmente famoso por El Corazón de las Tinieblas, solía encerrarse horas enteras en el baño con la llave del lavamanos abierta para que el sonido del agua le inspirara a escribir.

Este estado casi catatónico lo absorbía tanto que, irónicamente, podía estar días enteros metido en el baño escribiendo sin bañarse.

Grandes poetas como Mario Benedetti no ocultaron su seductora obsesión por el agua, en especial el mar, al que le dedicó cientos de poemas en donde se cuestionaba el por qué el agua y el mar lo cautivaban tanto y lo inspiraban de una manera única y maravillosa.

Otros grandes artistas, como la escritora Virginia Woolf, tuvieron una relación tan intensa y obsesiva con el agua que no solo sirvió de inspiración para sus novelas, sino que fue el medio elegido para quitarse la vida cuando decidió arrojarse al Río Ouse tras experimentar una violenta crisis depresiva producida por su trastorno bipolar.

El jacuzzi para exterior como musa inspiradora

Después de hacer este profundo repaso a la enorme influencia que el agua ha tenido como fuente de inspiración para el ser humano no nos queda más que preguntarnos todo lo que pudiéramos crear bajo el maravilloso embrujo relajante de un jacuzzi para exterior.

Con esto no deseamos insinuar que tendrán un descubrimiento inminente dentro del jacuzzi para exterior ni de que instalen un ordenador para escribir mientras se bañan, pero sin duda sus maravillosas virtudes relajantes y placenteras pueden ser una inesperada y efectiva fuente de creatividad.

Después de todo, el ingenio humano es algo maravilloso que aparece cuando menos lo esperamos, ya sea a orillas del mar, en un hermoso prado, una mágica noche de luna llena, o sencillamente en medio de un agradable y placentero baño dentro de un jacuzzi para exterior.

Por: Web del Hidromasaje